LEERLES UN CUENTO ANTES DE DORMIR
La voz es una
herramienta muy útil para ayudar a nuestro hijo a conciliar el sueño. Los niños
reconocen la voz de la madre, padre o cuidadores desde antes de nacer por lo que
escucharla les transmite seguridad y confianza. Digamos que son voces
tranquilizadoras que hacen que el niño entre en un estado de relajación que le ayuda
a caer dormido.
Pero
la voz ha de utilizarse de forma adecuada. El tono debe ser suave y monocorde,
más o menos regular, los sobresaltos en la voz no son recomendables. La temática
debe ser cuidada también. Hay que evitar contenidos de alta emotividad o
violentos y debe adecuarse el lenguaje que utilicemos a la edad de nuestro hijo.
El
contarles una historia antes de dormirles aumenta el vínculo y encuentro que generamos con ellos.
Normalmente, el ritmo de vida occidental hace que pasemos poco tiempo con
nuestros hijos y que, parte de ese tiempo, estemos ocupados cuidándolos
mientras hacemos otras cosas (darles de comer, preparar la comida, recoger la
casa o limpiar), con lo cual, la atención exclusiva hacia ellos es realmente
poca. El momento
del cuento da lugar a ese encuentro entre padres e hijos donde la atención es
exclusivamente para ellos. Es un tiempo único para los dos, para conectar con
el niño, para conocerle y compartir con él sus emociones y sentimientos.